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LA NUEVA ERA DE LA CONSULTORÍA

I. Saber mezclar el estudio, la investigación y la consultoría

Hace unos meses hablaba con un colega consultor. Él formaba parte de una consultora internacional de mucho renombre. Me interesaba hablar con él para intercambiar puntos acerca del Futuro del Trabajo, la Transformación Organizacional, cómo veía el cambio constante, proyecciones y cómo se preparaban en la consultora para dar mejores herramientas y consultoría a sus clientes.

Terminé de hablar y me dijo: “Luis, yo no soy tan técnico, aquí vendemos productos terminados y no se nos da ninguna preparación, ni curso, no investigamos, no nos actualizamos.” Me quedé helado.

Como leía en una entrevista que le hacían a David Blay Tapia (un periodista y TEDxSpeaker): “Antes sólo los médicos y los abogados tenían que reciclarse, hoy somos todos.” Quizás lo entienda con mucha facilidad precisamente porque soy abogado (aunque ya no ejerza) o porque en mi Alma Mater la investigación, la práctica y la pedagogía iban de la mano. Lo cierto es que, ante un panorama cambiante, ante las olas de información, tenemos que estar actualizados e investigar a diario.

Ya he escrito bastante sobre estos temas, este post sobre cómo las organizaciones pueden fomentar el estudio en su día a día (aquí). En mi opinión, también las herramientas que dan a muchos consultores, entre ellos muchos MBA, ya están obsoletas, porque está pensado para un mercado particular en una época particular que ya no existe (aquí el otro post).

Como decía Álvaro González Alorda«no importa qué estudiaste, más bien ¿qué estás estudiando ahora y cómo?»

El consultor de hoy en día no se entiende si no está en constante actualización, no sólo por amor a la profesión, incluso por ética. Ha de saber mezclar el estudio, la investigación y la consultoría.

II. El mercado y la realidad compleja en la que vivimos

Ante este cambio constante e impredecible no podemos utilizar ni pretender usar estas mismas herramientas. No sólo porque la velocidad nos lo exige sino porque hay que partir de que vivimos en un sistema complejo.

Las organizaciones son un sistema complejo compitiendo en un sistema complejo. Las personas no están determinadas ni programadas. Si estos sistemas se ponen a interactuar generan un gran sistema complejo. Y está bien porque es natural. Si pretendemos atacar con una sola metodología y queremos abarcar todo el problema nos quedaremos muy cortos.

Las preocupaciones de las organizaciones son muchas y estas pueden ser algunas de las preguntas que nos piden resolver, o más bien, atender y ayudarles:

¿Cómo se podría ser más ágil? ¿Cómo puedo hacer entender a mi organización que hay que cambiar? ¿Cómo puedo compatibilizar la tecnología con mis formas de trabajo? Cuando lo consiga, ¿qué es lo que sigue?


Estas preguntas quizás no sólo necesitan una mera estrategia de comunicación, diseño de equipos, crear contenidos para la organización o un simple Change Management. Quizás quedarían algo cortas estas soluciones. Quizás algunas organizaciones no estén cuestionándose de esta manera. Y malamente no podría quedar y morir en un simple Town Hall o evento de integración. Y luego si realizamos el servicio, ¿qué pasará después? 

Los consultores tenemos que partir de que no tenemos la respuesta. Que quizás aunque hayamos tenido casos de éxito, no podemos decir que en todas las organizaciones sean lo mismo. Incluso dentro de la organización las necesidades de los departamentos son distintas. De hecho nos han buscado distintos departamentos de la misma organización, aunque efectivamente podemos ir escalando la manera, por ejemplo, de realizar nuestras juntas o formar equipos. De tal manera que podamos realizar proyectos entre distintos departamentos. Pero efectivamente, quizá a algún departamento le funcione más hacer una estrategia de comunicación y al otro quizá quitar procesos que están de más y estorban.

III. La Confusión

No creo que exista una apatía por el cambio ni que las personas que estén trabajando en las organizaciones sean ciegas; lo que sí creo es que hay mucha confusión y ruido en el ambiente. Se desconoce la dirección que se ha de tomar y por qué. Muchas preguntas a este respecto son: ¿qué hacemos?, ¿por qué tenemos que cambiar?, ¿qué sí me sirve?, ¿ya escuchaste que están aplicando esto aquí y allá?

Ante este spaghetti de mercado que tenemos, de ruido y confusión muchos consultores vienen con soluciones intermedias y lineales; coach inspiracional y motivacional. Una colaboradora del equipo de transformación de una empresa regia me comentó en una junta que tuvimos la semana pasada: «una vez pagamos por un servicio Mindfulness y obviamente no funcionó. No podríamos aplicarlo siquiera a todo el departamento.» Y mientras tanto seguimos con soluciones intermedias. El tiempo pasa y el mercado sigue cambiando.

Muchos consultores sólo han ayudado a incrementar el ruido y la confusión, muchas veces por la falta de estudio y otras veces por mero oportunismo de aprovechar esta ola de sólo querer cambiar por cambiar.

Visitando a distintas organizaciones en estos últimos meses me han dicho el problema que experimentan cuando piden asesoría a las grandes consultoras. Es que éstas venían muy formales al punto de hacerlas cuadradas y dejaban sólo una serie de recomendaciones y les decían que lo hicieran. Pero estaba tan arriba y tan alejada del trabajo que no resolvía los problemas del día a día. Y los dejaba muchas veces hasta peor de que pedían sus servicios. Eso sí, pagaban mucho por sus servicios.

IV. Un posible camino

Recientemente IDEO hizo un estudio sobre qué es lo que define a las organizaciones más innovadoras y encontró: que es la habilidad de las organizaciones de adaptarse y responder al cambio. Y justo coincide con nuestra propuesta de valor: ayudarte a adaptar tu organización para el Futuro del Trabajo.


En Polymath partimos de esta realidad. Y sí, utilizamos distintas metodologías con el propósito de preparar a las organizaciones para el futuro del trabajo dándoles herramientas para que se puedan adaptar al cambio constante e innovar. Y si buscamos esta adaptabilidad, flexibilidad y capacidad de reacción de las organizaciones a las que atendemos, no podemos darles una sola metodología, nos quedaríamos cortos.

Sí tenemos productos concretos como nuestro Taller Transforma o nuestro Taller de Líderes Responsivos. Y los utilizamos como punto de partida para nuestros clientesQue ellos mismos vayan descubriendo las áreas de oportunidad a la par que les explicamos el trabajo de hoy en día, sus retos, y darles una mentalidad que les permita entender otra forma de organizarse y de trabajar, y dándoles herramientas para hacerlo. En el Taller de Líderes Responsivos que además que ellos entiendan qué es la transformación organizacional, hacia dónde va, por qué es necesaria hacer y lo sepan explicar. Creemos que el líder responsivo no sólo comunica e inspira, sino que sabe adaptarse constantemente, sabe hacer y dejar ser a los equipos, sabe cómo priorizar, tomar en cuenta la opinión de los demás, sabe dar autonomía, crear comunidades de aprendizaje y es un líder transformador.

Los consultores hoy en día tenemos que trabajar lado a lado de la organización. Necesitamos ensuciarnos, aterrizar en el día a día, ser facilitadores. Porque al final quien realiza el cambio y hace que la transformación sea real son los miembros de las organizaciones. Vemos a la Transformación Organizacional como un proceso que se va haciendo y al cual acompañamos a la organización, experimentamos, ajustamos, volvemos a la acción, y no como un proceso rígido y lineal y que acaba con un «y vivieron felices para siempre». Creemos que es un proceso que no termina, que se va ajustando y adaptando constantemente, y en el camino vamos encontrando oportunidades. La Transformación Organizacional ejercita a la organización, la pone en forma y continúa.

Hablando con una persona del departamento de Transformación de una organización regia me decía que efectivamente buscaban que los acompañaran. Los consultores se convertirán como el doctor o el abogado que los acompaña, los escucha, los asesora, les enseña y les ayuda a crecer. 

Vienen los años más interesantes y apasionantes en la historia de las organizaciones y su transformación. Creemos que los próximos diez años, tal y como lo dice Richard Foster de Yale University, veremos qué organizaciones decidieron transformarse, cuáles fueron bien asesorados y aprendieron a vivir en la complejidad.

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