Si quieres llegar lejos; tienes que tener resultados que te permitan celebrar de poquito en poquito. Como bien sabes John Doerr, de la mano de su maestro Andy Grove; fundamenta el éxito de la implementación en sus OKR’s.
Para poder celebrar estas pequeñas victorias has de tener muy claro tu objetivo; lo que pretendes alcanzar. El mismo Doerr, recomienda que estos objetivos han de ser concretos, orientados a la acción pero que al mismo tiempo inspiren. Piensa a dónde te gustaría llegar, en qué te gustaría impactar. Y en esta misma línea, tendríamos que tener también buenos resultados claves, que son el cómo llego a mis objetivos. Te has de preguntar si tus resultados claves: ¿Se pueden medir? ,¿se pueden ir checando si se van cumpliendo?
Un ejemplo fácil es del equipo de fútbol, el objetivo: es ser campeones. Es un objetivo ambicioso, incómodo, apela a todo el grupo, motiva. Resultados claves: partidos ganados, goles favor, efectividad, generación de jugadas de peligro, pocos goles en contra.
En Polymath nuestros OKR’s son bimestrales. Nos gusta retarnos, tirar lo más alto que podamos. Te recomendamos el formato de Re:Work. Una calificación de 7 puntos es un resultado excelente en este caso.
¿Ahora podemos celebrar pequeñas victorias? Teniendo estos OKRs claros ayuda mucho a ir festejando la consecución de estos resultados claves. Podemos aumentar la frecuencia de los mismos.
¿Qué más puedes hacer?
a) Comunicar estos resultados claves. En un estudio de McKinsey dice que cuando los directivos comunican el progreso de la transformación tienen 8 veces más posibilidades de que la transformación triunfe. 3.8 veces más si utilizan una narrativa de cambio. 4.4 vecesmás si comunican las implicaciones que tendrá el cambio en el día a día de los colaboradores.
b) Acuérdate del ritmo de juntas que recomendamos y usamos en Polymath. Los lunes planeo y el viernes entrego. ¿Cómo van esas juntas donde vas viendo y aterrizando cada uno de esos resultados clave? ¿Cómo repartes esas tareas diarias para alcanzar ese objetivo clave.
c) Transparencia. La semana pasada estuvimos con una empresa regia tradicional de manufactura. En un de las pláticas informales que surgieron destacaron la falta de motivación o el cansancio ocasionado por la falta de transparencia. Que a pesar de que la intención de la organización era muy buena: apostar por la innovación; se había quedado en buenas intenciones; porque no había un objetivo claro general ni a nivel organizacional ni a nivel equipo. Y no había una transparencia de hacia donde iban a ir a nivel organizacional ni sus prácticas de equipo lo tenían. ¿Qué tan transparente eres?
d) Cada dos meses podrías organizar los entregables de tus OKR’s a otros departamentos. ¡Celébralo! No tienes que tirar la casa por la ventana. Algo pequeño. Una presentación; una comida o cena especial. Recuerda que nos encanta la visión de contenidos en Polymath. Una junta con todo el departamento o una especie de junta de TGIF.
James Watson, el descubridor de la estructura del ADN, finalizada toda esta investigación sobre el ADN empezaron a documentar los insights. Uno de ellos fue el principio del progreso del cual decían que de todo aquello que les hacía levantar emociones y motivarlos durante su día a día era hacer progreso en un trabajo valioso. Son esas «small wins» y ser conscientes de ello porque las comunicamos y festejamos.
No esperes a final de año; no esperes hacer fiesta sólo en la gran inauguración de algo; o el lanzamiento. Aterriza esos objetivos a plazos más cortos, baja tus resultados claves y festeja esas small wins. Y te darás cuenta con mayor facilidad que tu trabajo puede ser más divertido y provechoso.